sábado, 13 de febrero de 2010

Valentine

valentine

Hace ya muchos años viví una temporada en Estados Unidos. Durante ese tiempo tuve la oportunidad de ver como esa sociedad de consumo se mueve por impulsos festivos. Los flujos comerciales son muy marcados y marcan el ritmo de vida de toda una sociedad. El año comienza con los preparativos para San Valentin, los escaparates navideños se cambian directamente por otros llenos de corazones, rosas y motivos "amorosos". Para ellos San Valentín no se refiere solamente a las parejas de enaromados sino al amor en si (lo que da todavía más juego comercial). Los escaparates de San Valentin se cambian por los de Pascua, y así sucesivamente...
No tengo nada en contra de las celebraciones, me gustán y no tengo nada en celebrar un día especialmente el amor. Lo que puede resultar molesto es sentir que nuestras vidas se mueven al ritmo que marcan las grandes corporaciones y los centros comerciales...

Demostrémonos amor a diario y marquemos el ritmo de nuestra propia vida...

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